Anuncios
U.S. markets closed
  • S&P 500

    5,537.02
    +28.01 (+0.51%)
     
  • Dow Jones

    39,308.00
    -23.90 (-0.06%)
     
  • Nasdaq

    18,188.30
    +159.54 (+0.88%)
     
  • Russell 2000

    2,036.62
    +2.75 (+0.14%)
     
  • Petróleo

    83.32
    -0.56 (-0.67%)
     
  • Oro

    2,369.40
    0.00 (0.00%)
     
  • Plata

    30.84
    0.00 (0.00%)
     
  • dólar/euro

    1.0790
    +0.0002 (+0.02%)
     
  • Bono a 10 años

    4.3550
    -0.0810 (-1.83%)
     
  • dólar/libra

    1.2747
    +0.0000 (+0.00%)
     
  • yen/dólar

    161.4370
    -0.1070 (-0.07%)
     
  • Bitcoin USD

    58,843.37
    -2,156.52 (-3.54%)
     
  • CMC Crypto 200

    1,233.67
    -27.52 (-2.18%)
     
  • FTSE 100

    8,171.12
    +49.92 (+0.61%)
     
  • Nikkei 225

    40,952.99
    +372.23 (+0.92%)
     

La red SUBE, un monopolio estatal del transporte: qué proponen los bancos para modernizar el sistema

En 2009, Argentina logró un importante avance en la modernización de los billetes de transporte en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) implementando la red SUBE. Este sistema de pago eliminó el uso de dinero en efectivo en colectivos, trenes y subtes. A la fecha, el sistema es el único medio de pago disponible para abonar el transporte público. En otras palabras, es un monopolio en manos del Estado.

Actualmente, el sistema se encuentra obsoleto y genera inconvenientes para los usuarios. Dentro de los principales problemas se encuentran: la dificultad para conseguir tarjetas, la falta de integración con otros medios de pagos y la imposibilidad de cargar la tarjeta de forma completamente online (en todos los dispositivos electrónicos). Además, el Estado se beneficia de manera directa con la adopción de este sistema al disponer a diario del saldo de los usuarios y demorar el pago de los boletos (y subsidios) a las empresas.

Entonces, ¿existen propuestas para mejorar el sistema en el corto plazo? ¿Cuál es la magnitud de este monopolio?

Datos de movilidad urbana

La red SUBE representa una gran caja para el Gobierno nacional. Según un informe del Banco Central (BCRA), en marzo de 2023, los usuarios del transporte público realizaron casi 400 millones de viajes utilizando la red SUBE. El valor total de estos viajes fue de, aproximadamente, $12.800 millones.

PUBLICIDAD

La obsolescencia y decadencia de este monopolio es cada vez más notoria. El sistema de recarga tiene fallos recurrentes y las terminales para acreditar o cargar la tarjeta (en el AMBA) se han reducido en un 14% en los últimos 3 años. Además, el saldo de la tarjeta tiene límites que continuamente quedan atrasados producto de la inflación. Es por esto que el sistema representa un obstáculo para la movilidad urbana.

Durante los días de semana de junio, un promedio de 3,75 millones de personas por día utilizaron la tarjeta SUBE para movilizarse dentro del AMBA. Al momento, no existen estimaciones certeras acerca del saldo promedio que acumula cada una de estas tarjetas y los datos públicos acerca de las mismas se encuentran fuertemente limitados. Hoy en día, la información disponible sobre la movilidad urbana proviene de aplicaciones móviles, porque desde 2019 existe un gran apagón estadístico respecto a este tipo de datos.

Colectivos: la tarjeta SUBE es el medio de pago monopólico en el AMBA.
Colectivos: la tarjeta SUBE es el medio de pago monopólico en el AMBA.

Colectivos: la tarjeta SUBE es el medio de pago monopólico en el AMBA.

Comprendiendo las tarifas y los pagos

Las tarifas para movilizarse en el AMBA parten de los $30 pesos para trenes, $50 para colectivos y $74 para subtes. De todos modos, estas tarifas se encuentran subsidiadas y determinadas por el Estado nacional. A modo de ejemplo, el Estado cubre aproximadamente el 85% del costo de los colectivos.

En diálogo con iProfesional, empresarios del sector comentaron que no llegan a cubrir los costos con las tarifas y subsidios vigentes. Ellos afirman que los subsidios acumulan un atraso de 7 meses, pero este no es el peor dato. Lo peor de la situación es que los subsidios se pagan con una demora cercana a los tres meses.

Aquí es donde hace su juego el Estado. Por un lado, dispone libremente del saldo de las tarjetas de transporte en cualquier momento; y, por el otro, demora el pago de las tarifas. Por consecuencia, el estado se queda con una ganancia neta por la tenencia del dinero en un entorno de altas tasas de interés ( e inflación). Esta ganancia es idéntica a la pérdida de poder de compra de los usuarios y transportistas. En otras palabras, el Estado dispone de una masa de dinero por adelantado -al ser el poseedor de los fondos depositados en la red SUBE- sobre la cual obtiene un retorno especial que no es distribuido.

Una solución para la red SUBE

iProfesional consultó la propuesta de la Asociación de Bancos Argentinos (ADEBA) para democratizar y universalizar este sistema de pagos. Ellos proponen que en el mediano plazo se implemente la posibilidad de abonar con medios de pago contactless. "Se debería incorporar la opción de pagar el transporte público con tarjetas de crédito, débito o prepaga; tecnología NFC (near-field communication); y demás opciones que hoy se encuentran disponibles para pagos en comercios", señalan los banqueros. ADEBA explica en su nota técnica que estas formas de pago ya están presentes en distintos países latinoamericanos como Brasil, Colombia, Guatemala y México.

Para ADEBA, la oportunidad de incorporar medios de pago contactless es inmensa. "Sólo a modo de referencia, en la Argentina hay más de 91 millones de plásticos emitidos entre tarjetas de débito y crédito bancarias, además de las tarjetas prepagas emitidas por fintechs". Por lo que se solucionaría la gran problemática de falta de tarjetas SUBE.

De todos modos, la propuesta de los bancos implica grandes desafíos que según ellos deben resolverse mediante el trabajo combinado del sector público y privado. "Le corresponde al sector público -que involucra autoridades de transportes de Nación, Ciudad y PBA, BCRA, y otros organismos- generar el marco normativo que establezca la universalización de medios de pagos". A su vez, la implementación de la propuesta requerirá inversiones en infraestructura pública y privada. Principalmente el estado deberá: actualizar las máquinas lectoras, mejorar las comunicaciones y aumentar el alcance del internet. Por el lado de los privados, estos tendrán que invertir en: la instalación de los sistemas que permitan "leer" los diferentes medios de pago; y los proveedores de medios de pago deberán proporcionar los sistemas que soporten la operatoria.

Colectivos: los bancos proponen que se adopte las tecnología contactless presente en las tarjetas.
Colectivos: los bancos proponen que se adopte las tecnología contactless presente en las tarjetas.

Colectivos: los bancos proponen que se adopte las tecnología contactless presente en las tarjetas.

ADEBA concluye que esta iniciativa se deberá implementar en forma gradual y progresiva en los distintos medios de transportes y regiones de Argentina. Además, aclaran que "No se trata de remplazar la SUBE, sino complementarla con las opciones que actualmente permite la tecnología; construyendo sobre lo ya logrado". Según ellos, los encargados de la implementación de su propuesta serán el BCRA, la Comisión Interbancaria para los Medios de Pago de la República Argentina (CIMPRA) y las áreas de Transporte.

La modernización del sistema de boleto electrónico no sólo beneficiará a la mayoría de los argentinos que se trasladan día a día; también simplificará la vida de los turistas y limitará al rol del estado en el manejo de esta gran caja de fondos. Con la implementación de esta propuesta, el Estado dejará de decidir cuándo y cómo le paga las tarifas a los transportistas. Además, los usuarios dejarán de tener el gran costo de oportunidad que implica el dinero depositado en una cuenta que no devenga interés alguno y que, para colmo, es difícil de cargar.

Entonces, la falta de una red sube integrada al sistema financiero es puramente una decisión política. La implementación de distintos medios de pago reduciría el poder monopólico del estado en el transporte de pasajeros. Los beneficios de la propuesta son claros y ampliamente superiores a los costos que la misma implica. Los distintos empresarios del transporte consultados por iProfesional se encuentran dispuestos a implementar el sistema lo antes posible. Por lo tanto, está en manos de las autoridades actualizar el sistema de pagos de la red SUBE.