Yahoo Finanzas Lo que más impactó el bolsillo de los mexicanos en enero, productos y servicios que más subieron
La cuesta de enero es este fenómeno por el que transitan una gran parte de los consumidores durante el primer mes del año: dificultad para llegar a fin de mes, para pagar las deudas, los servicios y los gastos del día a día.
En México, diciembre es uno de los meses con los picos más altos de consumo, la población compra regalos, se va de vacaciones, organizan fiestas y cenas. Para enero, la realidad es otra y especialmente este 2024 se vio impactado por una inflación que acelera.
Durante el primer mes del año la tasa de inflación interanual se ubicó 4.88 por ciento; con este resultado suma tres meses consecutivos pisando el acelerador, de acuerdo con las series del Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía).
En el análisis inmediato se observa que, sólo de diciembre a enero, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) incrementó 0.89 por ciento. Este incremento estuvo presionado por el encarecimiento, principalmente, de productos alimenticios.
Este inicio de año se aplicaron las modificaciones del valor del IEPS (Impuesto Especial sobre Productos y Servicios) en línea con la inflación. Este impuesto, adicional al IVA, se aplica en algunos alimentos y bebidas ultraprocesados, como los refrescos y jugos o el tabaco.
En línea con el ajuste, en enero del 2024 se observó un alza de 3.90% en el nivel de precios de los cigarros y un encarecimiento de 1.01% para los refrescos envasados, en comparación con el mes previo.
Inflación de la canasta básica
Como algunos de los productos que más subieron de precio en esta cuesta de enero tienen alta representación en el gasto total de los mexicanos, la tasa de inflación de la canasta básica también aceleró; ubicándose en 4.72 por ciento.
De hecho, en el análisis mensual, el nivel de precios de la cesta de consumo mínimo fue mayor que el del índice general. En este periodo se encareció 1.14% de diciembre a enero.
La cesta de consumo mínimo concentra las variaciones en los precios de 176 productos y servicios (de 299 que tiene el INPC general) considerados fundamentales para cubrir las necesidades básicas de nutrición, salud, vestido y calzado, educación, transporte, vivienda, recreación y cultura.
Monitorear el comportamiento de esta cesta es fundamental porque impacta, sobre todo, en los bolsillos de los hogares más pobres y vulnerables del país, que destinan casi el total de sus ingresos a los bienes y servicios de la canasta básica.
Esto se refleja también en la tasa de inflación observada por estrato del gasto. Mientras los hogares de la clasificación de “hasta un salario mínimo” enfrentaron una inflación interanual de 5.76% este enero, en los hogares en la clasificación de “más de seis salarios mínimos” la tasa fue de 4.71% (incluso menor a la tasa general).
Las familias más pobres gastan más en productos que son más volátiles o que encarecen de manera más acelerada, como las frutas, verduras, legumbres, proteínas animales y cereales. Se estima que 5 de cada 10 pesos que gastan estos hogares se va solo a la alimentación de sus miembros.
Aunque la inflación, especialmente en periodos de dificultad económica como en la cuesta de enero, impacta a toda la población, las personas de menores ingresos o con carencias son golpeadas con mayor fuerza.
ana.garcia@eleconomista.mx
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